Hoy voy a dar unas pinceladas sobre uno de los personajes más singulares de la Argentina. Una mezcla de caballero andante de las aguas, y de alado Fénix que siempre regresa como las olas del mar.
Singular personaje que ya por aquel entonces, y poco antes de partir justificó su periplo por el mundo con esta frase:
"Voy en esta época materialista, a realizar una empresa romántica, para ejemplo de la juventud."
En esta modernidad de efímera vacuidad, quedan reverberando sobre la playa, los libros que escribió, sus óleos y acuarelas, sus gaviotas dibujadas en las páginas silentes de los libros, y más aún, queda su espíritu de viento sinfónico y salino.
Vito Dumas (n. Buenos Aires, 26 de septiembre de 1900 - † Ídem, 28 de marzo de 1965) Pasó su infancia en un campo de Trenque Lauquen, provincia de Buenos Aires.
Navegante y deportista argentino que practicó natación, boxeo y atletismo. Es también el primer navegante solitario en recibir The Slocum Award por haber dado la vuelta al mundo.
En 1925 fue campeón mundial de permanencia en el agua. Además cultivó la pasión por la pintura, las letras y la escultura. Cursó estudios en la Academia de Bellas Artes.
Tenía veintitrés años cuando probó cruzar a nado el Río de la Plata. No pudo. Y no falló esa única vez ni dos ni tres, sino cinco veces. Al tiempo viajó a Francia para intentar la hazaña nadando de una orilla a la otra del Canal de la Mancha. También fracasó. Pero todo eso no hizo más que fortalecerlo.
Navegación en su velero Legh I
El 13 de diciembre de 1931 partió de Arcachón (Francia) en su embarcación el "Lehg", construida en Francia en 1918, con las medidas siguientes: eslora
máxima: 12,8 m; eslora de flotación: 6,12 m; manga: 2,15 m; calado: 1,6 m;
superficie vélica aproximada: 100 m².
Después de 121 días de navegación recáló el 12 de marzo de 1932 en el Yacht Club Argentino en Buenos Aires.
La travesía había sido tan dura que dijo públicamente que no volvería a navegar esas distancias. Acorralado por la situación económica, compró un campito barato y cambió su barco por un tractor. El se hacía agricultor para vivir y, así, se auto convenció, pero mientras pasaba el tiempo y trabajaba la tierra, iba creciendo otra vez en su ánimo la necesidad de navegar. Un día se decidió y se fue del campo. Dijo: "No quise mirar para atrás. Bajé la tranquera".
Navegación en su velero Legh II
Tras
alejarse del mar se estableció en una chacra (granja, casa de campo) del
partido Capitán Sarmiento de la provincia de Buenos Aires. Dos años más tarde,
probablemente pensando ya en una vuelta al mundo, se hizo construir el Legh II,
con las siguientes características: Cubierta: 9,55 m; manga: 3,30 m; calado:
1,60 m; superficie vélica: 42,15 m²; lastre 3.500 kg; construido por J. Parodi
y M. Campos en Tigre con planos de este último. Un queche de desplazamiento con
quilla corrida y doble proa (de popa noruega).
La vuelta al mundo fue lo que lo consagró como el navegante solitario más importante de la historia. Como anécdota se cuenta que cuando fue a sacar el Pasavante, hoy llamado rol o despacho, en Bs.As. no se lo dan, pero sí en uruguay.
El 27 de junio de 1942, en plena Segunda Guerra Mundial, partió a realizar la increíble proeza, como símbolo de Paz.
Eligio la ruta hacia el naciente por el paralelo 40, llamado por los navegantes la de los “40 bramadores” por el rugido constante de los vientos. Llevo nuestra bandera por todo el mundo en un pequeño barco, sin motor, sin equipo de radio, pero con profunda pasión.
Escribió 5 libros, "Mis viajes", "Solo, rumbo a la Cruz del Sur", "Los cuarenta bramadores" y "El crucero de lo imprevisto", "El Viaje del Sirio".
La travesía no fue simple, él ya lo sabía, se enfrentó con duras tormentas, fuertes olas y vientos implacables, en un océano plagado de barcos de guerra que disparaban ante cualquier desconocido. Era una mala época para navegar (sin motor) y sin otra compañía que sus sueños y utopías.
Regresó durante la mañana del domingo 7 de septiembre de 1943, luego de 437 días de los cuales 274 fueron navegando y luego de haber recorrido 20.420 millas marinas (37.818 km) a través de tres océanos. Maltrecho pero triunfante se lo vió llegar, miles de personas lo aguardaban.
Otras Proezas
En septiembre de 1945, con su inseparable "Lehg II", decidió emprender una travesía más, consistente en navegar hacia el Norte con destino a Nueva York. Su libro al respecto lleva el título de su viaje, El crucero de lo imprevisto: Buenos Aires, Montevideo, Punta del Este, Río de Janeiro, La Habana, Nueva York, Ceará, Montevideo, Buenos Aires.
A punto de culminar su intento, frente a Coney Island, fue arrastrado mar afuera y el mundo lo dio por muerto, hasta que fue descubierto por el barco Serantes, al sur de las Islas Canarias. Logró seguir navegando y recaló en Ceará, Brasil. Pasó 106 días en soledad, concretando el doble cruce del Atlántico recorriendo 17.045 millas en 234 días.
Posteriormente, trazó otro objetivo un poco menos desafiante: unir los puertos de Buenos Aires y Nueva York, en una sola escala, 7.100 millas, 117 días, proeza que logra en 1955 con su nuevo barco, el "Sirio", una embarcación más pequeña aún que el Legh II.
Huellas y Estela de Vito Dumas
El Legh I se halla en el Museo de Luján .
El Yate Lehg II de Vito Dumas, así como su legendaria pipa, se conservan actualmente en el Museo Naval de la Nación ubicado en la ciudad de Tigre
- Monumentos -
Busto en Club Naútico Ushuaia, Provincia de Tierra del Fuego - Argentina-
Monumento homenaje a V. Dumas: "El Navegante Solitario" en el paseo de la costa de Vicente López.
-Vito Dumas en el Tango -
Francisco Canaro y
su Orquesta típica, compone en honor a Vito Dumas un tango: ”Marcha” cantado
por Agustín Irusta.
Jaime Yanin compuso
música y José Horacio Staffolani compuso la letra del tango: Navegante (Vito
Dumas), cantado por Roberto Rufino con la Orquesta típica de Carlos Di Sarli
(5-8-1943).
- Calles -
Calle "Lehg II", en Monte Hermoso, Provincia de Buenos Aires -Argentina-
Calle "Vito Dumas", en Barrio Sarmiento, Partido de La Matanza, Provincia de Buenos Aires -Argentina-
Calle "Vito Dumas", en Barrio de Liniers, de la Ciudad de Buenos Aires -Argentina-
Calle "Vito Dumas", en la ciudad de Ciudadela, Partido de Tres de Febrero, Provincia de Buenos Aires -Argentina-
Calle "Vito Dumas", en la ciudad de Ezeiza, Partido de Ezeiza, Provincia de Buenos Aires -Argentina-
Calle "Vito Dumas", en la ciudad de Mar del Plata, Partido de General Pueyrredon, Provincia de Buenos Aires -Argentina-
Calle "Vito Dumas", en la ciudad de Mercedes, Partido de Mercedes, Provincia de Buenos Aires -Argentina-
Calle "Vito Dumas", en la ciudad de Morón, Partido de Morón, Provincia de Buenos Aires Argentina-
Calle "Vito Dumas", en el Puerto de Olivos - Olivos, Provincia de Buenos Aires -Argentina
Calle "Vito Dumas", en la ciudad de Salta, Provincia de Salta -Argentina-
Calle "Vito Dumas", en la ciudad de Tigre, Partido de Tigre, Provincia de Buenos Aires -Argentina-
Calle "Vito Dumas", en la ciudad de Ushuaia, Provincia de Tierra del Fuego -Argentina-
Calle "Vito Dumas", en la ciudad de Victoria, Partido de San Fernando, Provincia de Buenos Aires -Argentina-
Paseo "Vito Dumas", paseo costanero con su nombre a orillas del Río de la Plata, Ciudad de Vicente López, Partido de Vicente López, provincia de Buenos Aires - Argentina-
-Otros-
-Correo Argentino -Argentina-
Estampilla conmemorativa de V. Dumas.
-"MAKAO" - Café Museo de Vito Dumas, de Agustín Vila en Playa Varese, Mar del Plata, provincia de Buenos Aires -Argentina-
Fragmento del libro: Los Cuarenta Bramadores
"He iniciado el viaje hacia el continente africano, del que me separan más de cuatro mil millas. Conoceré el terrible efecto de los cuarenta bramadores. Es la primera vez que un hombre solo se arriesga a navegar en esa latitud. Que me deparara el mañana? Por de pronto, se que todo mi mundo y mi seguridad residen en estas maderas que me cobijan"... "Al mirar ya por popa ese puñado de amigos de tan querida tierra, lloro amargamente. Necesitaba ese llanto. Por mucho tiempo lo había contenido en mi papel de hombre inconmovible. Ahora soy nada mas que un niño."... "la noche es negra. No se distinguen señales de vida por ningún lado. Llevo casi cuarenta horas de trabajo continuado. No he probado alimento alguno."


Dedicatoria en Portada: Dibujo Acuarela realizado por Vito Dumas