12.2.17
Noche en Praga (Václav Hrabè) / Night in Prague (To Václav Hrabě) /JAZZ-Improvisations to be read with a sax
4.2.17
La Casa de Atahualpa Yupanqui
LA CASA DE ATAHUALPA YUPANKI
Regresando en moto desde el Machu Picchu (Perú), y ya bordeando el medio día, ingresé a la zona norte de la Provincia de Córdoba. Surqué la intersección de los departamentos Río Seco, Sobremonte, y Tulumba. Bajo un sol de estío, y un cielo bien celeste, danzaba el misterio.
El nuevo destino, fue conocer la casa-museo del inolvidable cantor y poeta Atahualpa Yupanqui. La moto avanza con un galope lento y casi onírico hacia la casa de Don Ata.
Ascendí hasta la cima del cerro Colorado, entre las almas de las piedras del camino. Hacia un lado el arroyo Los Tártagos, aguas claras.
Trasponiendo la tranquera apareció “Agua Escondida”, nombre de la Casa
de Atahualpa Yupanqui quien la utilizaba como refugio, después de sus viajes
por distintos lugares del mundo.
El alma del poeta cantor late en este mágico paisaje rodeado de garabatos, de chañares, de viejos algarrobos,, de quebrachos blancos, de quebrachos colorados.
Dentro de esta antigua residencia, hoy
transformada en museo, se exhiben objetos personales del famoso compositor y
poeta. Desde un cuadro pintado y autografiado por Benito Quinquela Martín,
hasta la guitarra encordada para zurdo y personal de Atahualpa.
Atahualpa Yupanqui falleció en Nimes, Francia, el 23 de mayo de 1992. Se encontraba en la ciudad francesa para recibir un homenaje.
Atahualpa decía que "siempre bajo un árbol anida un pájaro y entonces, el sueño del poeta se vuelve golondrina". Por ello, sus cenizas descansan bajo un roble francés tal como era su deseo de última voluntad, en el Cerro Colorado, Provincia de Córdoba, República Argentina.
Antes de partir, hacia lo alto del Cerro Colorado sobrevolaban cientos de golondrinas.
Don Ata, como lo llamaba Favaloro, en París cantó con Edith Piaf, y vivió en la casa de Paul Eluard.
¿Lo sabías?
C.M.
LUNA TUCUMANA - Zamba
Yo no le canto a la luna
porque alumbra y nada más;
le canto porque ella sabe
de mi largo caminar
¡Ay, lunita tucumana,
tamborcito calchaquí;
compañera de los gauchos,
en las sendas de Tafí!
Perdido en las cerrazones,
¿quién sabe, vidita, por dónde andaré?
Mas cuando salga la luna,
cantaré, cantaré
a mi Tucumán querido;
cantaré, cantaré, cantaré.
Con esperanza o con pena,
en los campos de Acheral,
yo he visto a la luna buena
besando el cañaveral.
En algo nos parecemos,
luna de la soledad:
yo voy andando y cantando,
que es mi modo de alumbrar.
4.12.16
Dios confunde
Dios confunde
Llegué al primer piso.
Los abuelos estaban agobiados por el calor
de diciembre.
La brisa tibia escalaba por los ventanales
y mientras ayudaba a las hermanitas a
servir la comida
sonaba una olvidada canción de Nino Bravo.
Pregunté si sabían algo del misterioso
angelito que había
guiado a los rescatistas hasta el lugar de
la tragedia.
—así
como apareció desapareció- --dijo un
seminarista.
Una de las cocineras agregó su bocadillo —fue un milagro-.
Chiquita, una de las ancianas que suele
recitar a Borges,
—sorprendente
luminosidad --agregó Chiquita, una de las ancianas que
suele recitar a Borges—.
Se
formó una ronda en el comedor y todos veían en el niño un ángel
Niño
Ángel
Ángel
Niño
Yo mientras tanto barruntaba que en la
tierra del realismo mágico
todo podría ser posible.
Los abuelitos seguían masticando con una
voracidad exánime.
Me
acerqué a una de las mesas y comenté lo sucedido
— Dios confunde dijo el padre Luis, un sacerdote jubilado—
Quedé
unos minutos turbado, como avistando posible el Paraíso,
y
que ciertos ángeles, tal vez custodiaban mi camino.
Puse
rumbo hacia la sala de tv ordenando el tránsito de silla de ruedas.
El
noticiero continuaba con el rimbombante homenaje al equipo Chapecoense, y alguien
respondía a un periodista:
—Cuando
veo esta lluvia yo creo que debe ser San Pedro llorando por la muerte de estos
jugadores.
Finalizada
mi misión, y ya bajando la escalinata de mármol, cortésmente saludo a la madre
del hogar, a quien con intriga y con prisa pregunto:
—¿han
encontrado al niño ángel?
—Ya
lo han encontrado. Era un lugareño- —dijo
con benevolencia—
Las
palabras del aquel sacerdote regresaron a mí como un eco de hielo.
Dios
confunde
Dios
confunde
Dios
confunde
C.M.
25.11.16
Dicen ponlo a dormir (del libro Monumento al Perro)
del libro Monumento al Perro
14.11.16
Biblioteca: Michel Houellebecq en Buenos Aires
Michel Houellebecq en Buenos Aires
Domingo
13 de noviembre y una copiosa lluvia caía sobre la plazita Serrano. Elegimos
el resto-bar Madagascar, mientras aguardábamos la hora del encuentro en Borges
1975 con Michel H.
Las
amplias ventanas del primer piso, nos permitían contemplar la quietud gris de
la calle. La sensación de hallarnos como en un faro a la espera del arribo de
alguna nave fantasma.
¿Por
qué recalé en Madagascar? (nombre de la isla del océano Índico). Luego supe que
Michel había nacido en Saint-Pierre, isla de La Reunión, Francia al este de
Madagascar. ¿Casualidad o causalidad?
Sentí
una montañosa alegría, cuando escribió su frase en la antología de poesía ( de
Anagrama) que lo tiene como autor. Con mano silenciosa dijo: ”Pour le poete
Carlos Martian, Michel Houllebecq”.
Recordé la historia de su amado perro, y alcancé a decirle en inglés: que me
despertaba un gran emoción la historia sobre su perro: Clement, y él solo
respondió: is dead.
De pronto sentí caer un telón de solitaria tristeza: la penumbra del lugar,
la seriedad del piano. La escena me recordaba la canción que solía cantar
Gilbert Becaud, Quand Il Est mort Le
poète (Cuando murió el poeta).
Antes de salir, y detrás de mí, una niñita llevaba entre sus manos un peluche
del Principito.
Allí entonces recordé, el significado de la palabra poesía.
12.11.16
Todo cambia
Nuestras ilusiones cambian
Los buenos se convierten en malos
Los malos se convierten en buenos
(así ha sido siempre)
y se desalienta el dolor
y se hunden lenguas que juzgan
Nuestras ilusiones cambian
Los buenos se convierten en malos
Los malos se convierten en buenos
(así ha sido siempre)
y al contemplar los disfraces del Obelisco
todo se parece cada vez más
a la Trump Tower
9.11.16
JAZZ -Improvisaciones para ser leídas con saxo. (JAZZ-Improvisations to be read with a sax)
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